El arquitecto estadounidense Dachi Papuashvil colocó un contenedor en forma vertical y otro horizontal, en equilibrio. Así armó una vivienda que tendrá cuatro pisos, y será fácilmente transportable y sustentable ya que podrá funcionar con independencia de las redes de energía.
El arquitecto Dachi Papuashvili desarrolló una micro casa en forma de cruz que se podrá construir a partir de contenedores marítimos. Además de ser súper compacto, el proyecto de este profesional georgiano terminó teniendo la forma de cruz cristiana.
Papuashvili, que tiene su oficina en Tiflis, la capital de Georgia, no quiere que su vivienda sea solo para acomodar a un clérigo o a un laico muy devoto, espera que la elija gente que necesite un refugio para estudiar o meditar. La intención inicial fue utilizar materiales de desecho para producir un prototipo que se pueda construir con facilidad y fuera completamente autosuficiente.
"En Georgia la construcción de monasterios y casas con piedras y hormigón es muy popular", explica el arquitecto y agrega: "Mi idea fue diseñar un hábitat para una persona, utilizando como materiales de construcción los residuos de las obras e industriales, y ahorrando lo más que se pudiera en gastos de mano de obra". Pensada para ser construida a partir de dos contenedores (uno colocado en forma vertical y otro, en equilibrio, de manera horizontal) la casa contendrá cuatro pisos dentro de una estructura bien llamativa que claramente adquiera la forma de una cruz. A pesar de la forma que tendrá, Papuashvili insiste en que su proyecto tuvo en cuenta la funcionalidad más que el simbolismo cristiano.
Proyectada para ser construida sobre una tarima, la casa tendrá en su planta baja la entrada y un espacio para las baterías que se alimentan con energía solar, los depósitos de agua de lluvia y un lugar de almacenaje de mercadería. En el segundo piso estará el área de aseo con el inodoro seco y una bioducha. El tercer piso será el “espacio de vida”, con un dormitorio, un armario, cocina y comedores (12 m2). En la terraza existe un espacio para orar (4 m2). El exterior, el edificio se cubrirá de madera y el techo será de chapa de acero galvanizada.
En la terraza, que se forma en uno de los brazos de la cruz, se colocarán paneles solares que servirán para proporcionar calefacción. La casa también recogerá agua de lluvia para su reutilización y contará con un inodoro seco que funciona con el sistema de compostaje. "Quise que la casa se pudiera construir con materiales reciclados, de manera sencilla y que pudiera ser fácilmente transportable. También me propuse que el edificio pueda funcionar con independencia de las redes de energía”, concluye Papuashvili.